En una noticia que ha causado un auténtico terremoto en el mundo del deporte y las redes sociales, fuentes cercanas al entorno empresarial y deportivo aseguran que Tim Cook, director ejecutivo de Apple y reconocido activista por los derechos LGBT+, habría ofrecido un contrato multimillonario a la tenista polaca Iga Świątek, reciente campeona de Wimbledon 2025.

Según estas informaciones, el acuerdo tendría un valor de 199 millones de dólares e incluiría una cláusula inédita: que la jugadora se comprometa a aparecer en campañas y anuncios a favor de la comunidad LGBT+ en cada uno de los eventos deportivos y mediáticos a los que asista durante al menos cinco años. Esta oferta, tan controvertida como innovadora, no solo supone un hito en la historia del marketing deportivo, sino que también ha generado un intenso debate ético, político y cultural a nivel mundial.

Iga Świątek, número uno del mundo y figura del tenis femenino, es conocida por su profesionalismo, humildad y dedicación dentro y fuera de la pista. Aunque ha mostrado en ocasiones su apoyo a causas sociales, nunca ha tomado una postura abiertamente política o ideológica en sus apariciones públicas. La filtración de esta oferta, por tanto, ha despertado la atención tanto de sus seguidores como de sus críticos, que ahora se preguntan si la joven estrella aceptará una propuesta de tal magnitud económica, sabiendo el impacto mediático y personal que eso podría suponer.
Pero el giro inesperado llegó poco después, cuando Paddy Pimblett, el reconocido luchador británico de artes marciales mixtas (UFC), decidió emitir un comunicado que sacudió aún más el escenario deportivo. En su mensaje, Pimblett expresó su preocupación por la creciente politización del deporte de alto rendimiento, subrayando que los atletas deberían poder centrarse en su carrera sin verse presionados por agendas ideológicas.
“Apoyo la libertad y los derechos de todos, pero me preocupa que se esté utilizando a los deportistas como vehículos de propaganda. El deporte debe unirnos, no dividirnos. Si el contrato ofrecido a Świątek es real, entonces es momento de abrir un debate serio sobre los límites entre marketing, activismo y competencia”, declaró Pimblett en su cuenta oficial.
Las palabras del luchador fueron replicadas por miles de usuarios en redes sociales, donde se abrió un candente debate entre quienes aplauden la iniciativa como un paso progresista hacia una mayor inclusión en el deporte, y quienes consideran que el gesto podría sentar un precedente peligroso para la independencia y neutralidad de los atletas profesionales.
Por su parte, ni Apple ni el equipo de Świątek han confirmado oficialmente la existencia de dicho contrato. Algunos analistas especulan que se trata de una maniobra mediática filtrada a propósito para medir la reacción del público o incluso para poner presión sobre otras figuras del deporte a unirse a movimientos similares.
A nivel institucional, varios comentaristas y exdeportistas han opinado sobre la situación. El extenista español David Ferrer comentó en una entrevista: “Si esto es cierto, estamos ante una nueva etapa del deporte profesional donde los valores personales y comerciales se entrelazan más que nunca. No es necesariamente negativo, pero sí complejo”. En contraste, la exnadadora olímpica australiana Stephanie Rice expresó su escepticismo: “Los deportistas no son carteles ideológicos, son seres humanos con historias únicas. Hay que tener cuidado con imponer una narrativa única.”
Mientras tanto, Świątek guarda silencio. Fuentes cercanas a su equipo afirman que está analizando cuidadosamente las implicaciones del contrato antes de tomar una decisión definitiva. Con tan solo 24 años, la tenista no solo ha conquistado títulos de Grand Slam, sino también el respeto de millones por su ética y disciplina. Aceptar o rechazar la propuesta de Tim Cook podría marcar un antes y un después en su carrera, no solo desde el punto de vista deportivo, sino también como figura pública e influyente.
Lo que es indiscutible es que esta situación ha abierto una conversación global sobre el papel del deporte en la sociedad moderna. ¿Deben los atletas comprometerse activamente con causas sociales? ¿O es mejor que mantengan una posición neutral y se concentren exclusivamente en su rendimiento? Mientras las opiniones se dividen, todos esperan una respuesta clara por parte de Świątek y de los involucrados.
Una cosa es segura: el deporte ya no es solo cuestión de raquetas, medallas o victorias. También es un terreno de ideologías, influencia y decisiones que pueden cambiar el rumbo de una carrera… o de toda una generación.